MUNICIPAL
Servicios Sociales sigue sin suplir bajas y solo cubre 5 de las 8 plazas prometidas
La «falta de recursos humanos» frena la tramitación de expedientes en los CEAS y en la propia Gerencia / La revisión del complemento salarial, pendiente de modificación presupuestaria en septiembre
Promesas cumplidas con cuentagotas en pleno caos administrativo. Dos meses y medio después de que las trabajadoras sociales desconvocaran temporalmente la huelga indefinida prevista a principios de mayo, el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Burgos sigue sin cubrir bajas y vacantes de personal, tanto en los centros de Acción Social (CEAS) como en la propia Gerencia de Servicios Sociales, pese a tratarse de un compromiso ineludible para evitar que las protestas fuesen a más.
Donde sí se ha dado «algún paso» es en lo relativo a la ampliación de la plantilla. De los ocho nuevos puestos comprometidos por el área de Personal, a día de hoy se han cubierto cinco. Y aunque la intención inicial del bipartito era incluir este asunto en la modificación presupuestaria del pasado mes de junio, finalmente tendrá que esperar a septiembre. Así pues, se ha llevado a cabo una actualización de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) tan solo sobre el papel, sin efectos prácticos hasta la fecha.
«No sé si tenemos realmente opciones de que en el mes de septiembre se vean cumplidos los compromisos adquiridos por la Corporación», reconoce José Dixneuf, trabajador social y miembro del sindicato CGT, mientras recuerda el «margen de maniobra» concedido por el colectivo para alcanzar un acuerdo de mínimos en base a sus múltiples reivindicaciones. Lo que está claro, y así lo pone de manifiesto, es que «los indicadores respecto a la gestión de personal no parece que vayan por buen camino».
Mientras el Ejecutivo municipal se lo toma con calma, la «falta de recursos humanos» empieza a hacer mella en los CEAS. En el de Río Vena, por ejemplo, esperan desde hace casi dos meses que se cubra la baja de una trabajadora. Por no hablar de los cinco meses de espera para un auxiliar administrativo en el de San Pedro de la Fuente o el «reciente vaciamiento», también de administrativos, en otros cuatro centros y los servicios centrales de la Gerencia.
La vacante del jefe de Sección Técnica de Acción Social lleva tres meses sin cubrirse.
Ante este panorama, Dixneuf describe una situación totalmente caótica que frena, e incluso «impide», la tramitación de expedientes de vital importancia sobre «derechos y prestaciones de servicios de dependencia, ayudas económicas, ayuda a domicilio, comida, teleasistencia...».
También inquieta, y sobrecarga, que hayan transcurrido tres meses sin cubrir la vacante del jefe de Sección Técnica de Acción Social. Aparte de suponer un «claro incumplimiento» del acuerdo marco de financiación de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, Dixneuf subraya que se trata de un «puesto clave», una «figura de referencia» que no solo «organiza el trabajo», sino que además asume la «interlocución, colaboración y trabajo compartido con la Administración autonómica, otras instituciones y otras secciones del proprio Ayuntamiento».
«No se está llegando en muchos casos por la falta de cobertura de esa profesional», insiste el trabajador social advirtiendo sobre una «limitación importante para el funcionamiento de la Gerencia». Entre otras cosas, porque sobre dicho puesto recae también la responsabilidad de elaborar las memorias y la planificación de los equipos en base al acuerdo marco de financiación.
Otro de los frentes abiertos de las trabajadoras sociales guarda relación con los complementos salariales, fijados en la RPT de 2019, que suponen un agravio comparativo en relación a otros puestos funcionariales con menores índices de riesgo. Tal y como expuso este periódico el pasado mes de abril, la diferencia llega a superar los 7.000 euros en casos muy concretos aunque la horquilla más común entre el colectivo y otros grupos ronde los 4.900 euros.
La valoración del puesto de trabajo para evaluar una subida del complemento salarial aún no se ha dado a conocer.
Sea como fuere, Dixneuf detalla que el equipo de Gobierno cumplió con su palabra al encargar una valoración del puesto de trabajo que ya se ha llevado a cabo. Sin embargo, las conclusiones aún no se han dado a conocer porque «está pendiente de que se entregue el documento en la mesa de negociación de funcionarios con las organizaciones sindicales representativas».
Por ahora, ni él ni sus compañeras tienen noticias al respecto salvo que, de entrada, estaba previsto abordar el asunto en la modificación presupuestaria de junio. Pero resultó que no, y todo parece indicar que habrá que esperar a septiembre.
Visto lo visto, no sería descartable que las trabajadoras sociales retomen la huelga una vez vencido el periodo de gracia. Aún con todo, Dixneuf considera que «ahora no procede adelantar actuaciones» porque la esperanza es lo último que se pierde. En cualquier caso, indica que «se valorarán las medidas a tomar en función de la respuesta» teniendo en cuenta, como han hecho hasta ahora, «la decisión que tome el propio colectivo».