Deportes licitará el derribo del velódromo por 378.000 euros y dará un mes para ejecutarlo

Se acerca el día en el que los restos del velódromo, muerto en vida desde hace años, desaparezcan del barrio de San Cristóbal. Si bien la realidad dista una vez más de los cálculos políticos, burocracia mediante, todo apunta a que este año sí tendrá lugar el derribo de las instalaciones, anunciado en un principio para 2024. 

Ya con el proyecto redactado, Deportes se afana ahora en elaborar el pliego para licitar la ejecución de esta obra. Está en una fase avanzada, según el concejal responsable del área, César Barriada, que recuerda que una vez esté listo este documento, deberá ser revisado e informado por distintas áreas municipales para obtener luz verde definitiva.

Con todo, explica que el presupuesto base de licitación será de 378.593,84 euros, si bien el coste definitivo de la actuación podría ser inferior si las empresas interesadas proponen una rebaja. El plazo fijado para demoler las dependencias es de un mes.

Cabe recordar que el Ayuntamiento contrató el pasado mes de septiembre la redacción del proyecto de demolición del velódromo de San Cristóbal por importe de 7.932 euros. La empresa Ángel Gil Arquitectura resultaba adjudicataria de aquel trabajo para el que, según la resolución oportuna, tuvo un plazo de tres meses.

El coste final recortó en más de la mitad el presupuesto estimado inicialmente y distaba de la cuantía máxima establecida para formalizar un contrato menor -es decir, sin concurso-, fórmula elegida por el área municipal en este caso. La seleccionada es una de las cuatro empresas a las que, tal y como marca la normativa, se solicitó una oferta ajustada a los parámetros marcados de inversión y tiempo de ejecución. 

«Seguimos dando pasos para que este proyecto sea una realidad», indicaba al respecto en aquel momento el concejal responsable de Instalaciones Deportivas, César Barriada. Con todo, y aunque quedaba, y queda, camino por recorrer, este primer paso era imprescindible para, por fin, dar una nueva vida al espacio ocupado por una dotación deportiva que nació muerta prácticamente en el año 1986 y que languidece desde hace décadas, mientras los distintos mandatarios municipales se planteaban qué hacer con ella.

El PP lo introdujo en su listado de prioridades y habilitó el año pasado una partida presupuestaria de medio millón de euros con la esperanza de poder gastarla en 2024. No pudo ser. Con esa intención visitó el concejal las instalaciones hace más de quince meses. Aseguraba allí que el cambio que se quiere realizar en el velódromo -que pasa por ubicar en ese espacio campos de fútbol de hierba artificial a modo de prolongación del recinto vecino José Manuel Sedano- estará terminado durante el actual mandato.

Detalló también entonces que la demolición será menos compleja de lo que inicialmente parece, según Barriada, ya que la pista es hueca, lo que facilitará su derribo. Además, añadió, «parte de la intervención que se va a realizar tiene que ver con la parte exterior, donde llevaremos a cabo un cerramiento que queda en la parte que coincide entre los vestuarios y el propio José Manuel Sedano».