Manso ve viable no subir la tasa de aguas en 2026 en Burgos
El responsable político del servicio recuerda que la decisión final compete a la alcaldesa, pero asegura que la exitosa captación de fondos europeos dibuja un escenario "favorable". Burgos tiene hasta el 30 de junio para ejecutar los 12,2 millones recibidos para modernizar la red

Un operario de Aguas de Burgos en el alividero del río Arlanzón, a la altura del paseo de la Isla.
"Blanco y en botella", respondía el concejal a cargo de Aguas de Burgos, Juan Manuel Manso, preguntado por el impacto que tendrán los más de 12 millones de euros de fondos europeos otorgados al servicio en el recibo. Daba a entender así, sin confirmarlo de manera expresa, que ve viable congelar la tasa en 2026, tal y como ocurría este año tras el controvertido incremento con el que el otrora bipartito de PP y Vox arrancó el mandato.
"No se lo puedo afirmar. Tengo que convencer a la alcaldesa, pero me parece que está de muy buen humor también. Esto va en el buen camino, porque si conseguimos recursos económicos por otras vías, como es el caso, no los tendrán que aportar los burgaleses", explicaba, para incidir, no obstante, que la decisión, que en última instancia compete a Cristina Ayala, debe someterse también a los oportunos estudios técnicos municipales.
Este podría ser uno de los efectos más 'visibles' de la exitosa captación de ayudas por parte de Aguas de Burgos, que a mediados de agosto sumaba 4.218.596 euros obtenidos en la tercera convocatoria dirigida a Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del Agua impulsada por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico a los casi 8 millones que recibía en la primera edición. En suma, 12,2 que formarán parte de una inversión total para la modernización de la red de 25 millones.
El plazo para ejecutar todas las actuaciones previstas -que en el caso reciente ubicaban a Burgos en cabeza de las propuestas seleccionadas de entre 151 solicitudes, merecedora, de hecho, de un 2,2% de la partida total- finaliza el 30 de junio de 2026 sin posibilidad de prórroga, según advertían desde la Unión Europea.
Apenas diez meses tiene, pues, por delante la sociedad pública Aguas de Burgos para acometer las mejoras referidas. Las vinculadas el primer PERTE están ya completadas al 65%, mientras que el 35% restante corresponden a contratos de envergadura a punto de formalizarse, como el de canalización e instalación de fibra óptica desde ETAP, hasta el poblado del embalse de Uzquiza, lo que permitirá avanzar a gran velocidad en lo que resta de año.
Los esfuerzos se centran ahora en optimizar la planificación de los 55 proyectos sufragados por el tercer PERTE, que se van a llevar a cabo gracias a los más de 4,2 millones obtenidos este verano -tras una resolución que se demoraba cuatro meses-, que en total supondrán un desembolso de 5,7, más IVA, cubierto, por tanto, al 95% por los fondos europeos.
Pese a lo complejo del reto que a priori se antoja materializar esta inversión en el plazo marcado, Manso se mostraba "totalmente convencido" de que llegarán a tiempo. "Nuestro objetivo es certificar el 100% de la subvención. Saben que siempre suele haber problemas en la gestión de estas ayudas, pero en Aguas de Burgos sabemos que somos capaces de hacerlo y para lograrlo estamos acelerando. De hecho, ayer mismo tomamos la decisión conjunta en el consejo de administración de incrementar el número de reuniones de una a dos mensuales para poder adjudicar todos los proyectos y los pliegos en los próximos dos o tres meses", detalló.
El plan financiado en la última convocatoria, denominado +WeBurgos, contempla 17 actuaciones y es una versión mejorada del plan presentado a la segunda convocatoria, en la que no obtuvo fondo alguno. Incluye hasta 55 proyectos de distinto tamaño en materia de planificación, digitalización y mejora de la gestión de la información y de la participación ciudadana.
Los avances a los que aspira Aguas de Burgos con su ejecución se centran en una mejora del estado de las masas de agua, principalmente de los ríos Arlanzón, Vena y Ubierna, a su paso por Burgos y "fundamentalmente en sus tramos aguas abajo, para optimizar el efluente". También se marca como objetivos una disminución de las pérdidas y una mayor garantía del suministro y una adaptación al cambio climático. Además, tiene un carácter innovador, dado que incluye un estudio de compostaje y restos de poda municipales junto a los lodos de la EDAR y la digitalización de las zonas verdes como medida de protección contra incendios.
Burgos
La potabilizadora de Burgos produce el 81% de la energía que consume y aspira al cien por cien
El Correo de Burgos | El Mundo
Incluye además herramientas tan necesarias como un plan de protección civil y sistemas de alerta contra posibles inundaciones, control de fugas y la digitalización del plan de emergencia de sequía, enumeró el concejal, para destacar entre las medidas que se beneficiarán de esta subvención la compra de las turbinas que harán posible que la potabilizadora (ETAP) pueda autoabastecerse de energía.