La Real Academia de Historia pide la catalogación de 'Deóbriga' como BIC

GABRIEL DE LA IGLESIA / Miranda

La Real Academia de Historia (RAH) se ha ratificado en las tesis en torno a la protección del yacimiento de Arce-Mirapérez, que a su juicio alberga sin ningún género de dudas las ruinas de la ciudad romana de Deóbriga.

Ya el pasado 18 de diciembre, EL MUNDO-EL CORREO DE BURGOS se hacía eco de un informe que la RAH acababa de redactar y en el que instaba a la Junta de Castilla y León a «paralizar de forma inmediata todos los trabajos» que se estaban llevando a cabo «en el área del yacimiento». Ahora, varias semanas después, el informe ya es público y sus conclusiones son demoledoras.

Según exponen los académicos, las obras de construcción del nuevo acceso al polígono industrial de Ircio a través de la carretera de Logroño suponen un «grave riesgo» para la conservación de una de las ciudades romanas de mayor importancia del norte de la península. A esa conclusión han llegado después de estudiar la numerosa documentación del yacimiento y los informes redactados por el equipo de arqueólogos que ha estado trabajando en la zona durante los últimos meses y cuyas conclusiones han permitido hacer un diagnóstico de la entidad de las ruinas.

Tal y como se plantea en dichos documentos, nos encontramos ante la ciudad romana de Deóbriga, cuya extensión superó en su día las 26 hectáreas y que pudo albergar a unas 6.000 personas en su momento de máximo esplendor, convirtiéndola así en una de las ciudades autrigona-romanas «más importantes del norte de Hispania».

Además, el informe emitido por la RAH se hace eco de los diferentes conflictos generados tiempo atrás a raíz de la construcción de la rotonda de la carretera de Logroño, que derivó en una denuncia ante el riesgo que entrañaban las obras para el yacimiento o la desestimación del proyecto del polígono industrial de Rottneros.

Por todas esas razones, además de solicitar la paralización inmediata de las obras del vial «hasta que se estudie el posible desvío de los accesos para que no perjudiquen» al yacimiento, la RAH insta a la administración regional a iniciar cuanto antes la redacción de «un expediente para declarar bien de interés cultural (BIC)» al mismo.

Esta catalogación abriría un nuevo escenario en el conflicto, ya que establecería un marco de protección a los restos hallados y aún por hallar, además de allanar el camino para futuras prospecciones en la zona.

A la espera

Ahora, la pelota está en el tejado de la Junta de Castilla y León, que deberá decantarse por alguna de las posibilidades actuales. Sin duda, la mejor recibida por parte de los historiadores, arquitectos, arqueólogos y entidades que llevan años defendiendo las tesis de Deóbriga sería la modificación del proyecto de enlace entre Ircio y la carretera de Logroño. Y es que, según se plantea desde diferentes ámbitos, un desvío de varios metros respecto al trazado inicialmente previsto permitiría conservar el yacimiento. A partir de ahí, su puesta en valor será otro menester, aunque todo dependerá de su catalogación como BIC.