El PCAS acusa a quienes se han ido del partido de «manipuladores»

J. F. CORCUERA / BurgosLos responsables del Partido Castellano (PCAS) tildan de «calumniosas y manipuladoras» las afirmaciones de los miembros de la formación escindidos en las que justifican su marcha por «la deriva nacionalista e independentista» del PCAS tras el Congreso celebrado en Segovia. Y subrayan que se define «ideológicamente como castellanista» y mantiene el rechazo «expreso» al «nacionalismo excluyente» y el «independentismo», indican en una nota.Tanto las Bases Ideológicas como los Estatutos aprobados por el II Congreso del PCAS en el mes de octubre de 2011 en Segovia, «ratifican y reiteran posiciones tradicionales de nuestra formación política, que en síntesis define al Partido Castellano (PCAS) como un movimiento castellanista, que defiende la identidad de Castilla dentro de la unidad de España», subrayan. La nota se centra en desmentir las afirmaciones de José Ignacio Delgado, exsecretario nacional del PCAL e impulsor del Partido Regionalista de Castilla y León (PRCAL).La «deriva nacionalista» fue, junto con el cambio de nombre de PCAL a PCAS, las razones que Delgado adujo en una comparecencia el pasado martes para justificar la salida de la formación castellanista de dos decenas de cargos públicos y otros tantos afiliados. En concreto, Delgado se refirió a una ponencia debatida en el Congreso de Segovia en la que se habla de «ejercer permanentemente el derecho a la libre determinación».La nota del PCAS incluye una aclaración respecto a esa cita donde subraya que una enmienda modificó la ponencia y desapareció del texto la frase «ejercer permanentemente el derecho a la libre determinación» sustituida por «el Partido Castellano intenta movilizar a una mayoría de los castellanos para ejercer permanentemente sus derechos como pueblo». Un modificación transaccional que, según el PCAS, que tanto José Ignacio Delgado «como sus compañeros de aventura deben conocer fehacientemente».Y desde el PCAS se lamenta que, quienes abandonaron el partido, «en lugar de construir un proyecto propio y positivo para la sociedad, que siempre respetaremos, basen exclusivamente su aportación a la política en manipular y desacreditar a la formación política de la que proceden, utilizando para ello falsedades».Los dirigentes del PCAS subrayan que mantendrán su trabajo por la ciudadanía de Castilla. Y también con la búsqueda de vías de colaboración «con todas aquellas formaciones que creen que los habitantes de nuestra tierra somos considerados por los grandes partidos ‘como ciudadanos de segunda’».La reunión en LermaLa ruptura en el seno del PCAS, oficializada este pasado martes en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en Burgos -en el mismo hotel donde primero Tierra Comunera y después el PCAL y el PCAS convocaban a los medios de comunicación en la capital-, se decidió sin embargo el domingo anterior, 29 de enero, en el transcurso de una comida celebrada en el Hotel Alisa de Lerma. Allí, veintisiete afiliados y cargos públicos del Partido de Castilla y León (PCAL) acordaban la creación de una nueva formación castellanista.