El Correo de Burgos

Sentir Aranda baja los precios para no retrasar más la apertura de la piscina cubierta

El Partido Popular votará a favor en el Pleno. El alcalde teme que la excesiva bajada desincentive a las empresas

La piscina municipal cubierta de Aranda lleva cerrada cerca de tres años

La piscina municipal cubierta de Aranda lleva cerrada cerca de tres añosLoreto Velázquez

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Terminadas las obras y con la esperanza de alcanzar un acuerdo que desbloquee la puesta en marcha de la piscina municipal cubierta, el equipo de gobierno de Sentir Aranda ha decidido ceder a las exigencias del PSOE y PP y bajará los precios.

En el nuevo planteamiento, que previsiblemente se aprobará en el pleno de final de mes, el precio de las entradas individuales contempla 2,25 euros para niños de 3 a 13 años; 2,85 euros para jóvenes de 14 a 30 años y mayores de 65, y 5 euros para adultos. Las personas con una discapacidad por debajo del 70% pagarían 2,25 euros y por encima del 75% quedarían exentos de pago, al igual que su acompañante y los menores de 3 años.

Hay que recordar que en el anterior borrador, que la oposición tumbó en el pleno, se fijaban precios que subían a 2,70 para niños; 3,40 para jóvenes y 6 euros para adultos.

El precio de los bonos de 20 baños también se rebaja al pasar de 50 a 40 euros para niños de 3 a 13 años; de 60 a 50 euros para jóvenes y mayores de 60 años, y de 100 a 85 euros para adultos. La única tarifa que se mantiene es la del bono de 20 baños para personas con discapacidad, por debajo del 70%, que seguirá costando 50 euros.

En cuanto a los bonos ilimitados, que el usuario podrá utilizar cuantas veces quiera, también hay cambios: el de niños de 3 a 13 años pasa de 120 a 100 euros; el de jóvenes y mayores de 65 años, baja de 160 a 135 y el de adultos, de 245 a 205. A todos los precios hay que restar las bonificaciones que hay para familias numerosas, personas con carnet joven europeo, familias monoparentales, personas con discapacidad y familias de categoría especial.

Además, y como novedad en esta nueva etapa, incorporan un abono familiar para parejas o padres con hijos, por 275 euros, 55 euros menos que en la propuesta anterior. También hay descuento para el acceso al gimnasio que dan los abonos ilimitados, que baja de 100 a 85 euros. “Hemos reducido los precios como indicaba el PSOE y espero que el PSOE actúe en consecuencia”, apremia el alcalde, Antonio Linaje, convencido de que el voto contrario del grupo socialista en el último pleno respondió a una “estrategia absolutamente política”. “Hubiésemos hecho lo que hubiésemos hecho habrían votado en contra”, lamenta molesto porque se está retrasando la apertura de una instalación muy demandada por la sociedad arandina.

Aunque la bajada de precios favorece a los usuarios, el alcalde de Aranda de Duero insiste en los riesgos que entraña esta segunda bajada de precios. Y es que tal y como advierte un informe técnico, con la bajada de tarifas se puede poner en riesgo la estabilidad económica de la empresa adjudicataria y puede desincentivar la presentación de ofertas. “Espero que finalmente esto no llegue a producirse, pero en el caso de que llegue a producirse la oposición es quien deberá dar cuentas y asumir su responsabilidad al forzar a esta ordenanza de precios públicos”, concluye convencido de que con este nuevo formato ya no se da prioridad a los abonos, una iniciativa que fomentaría los hábitos de vida saludables. A este respecto el regidor recuerda que el informe técnico inicial aconsejaba precios que llegaban a los 8 euros.

Aunque el equipo de gobierno que forma Sentir Aranda con Podemos-Izquierda Unida y Ciudadanos confía en tener el respaldo del grupo socialista, por el momento es el Partido Popular el que ha dado el paso y anuncia que apoyará la votación. “La propuesta que se llevará para su aprobación al Pleno, no es la que le hubiese gustado al Partido Popular, que entiende que el incremento de costes de la vida en los últimos años no tiene por qué repercutir en una instalación de marcado carácter social. Sí hemos valorado como positiva, la voluntad del equipo de gobierno de alejarse de su planteamiento inicial de tarifas excesivamente elevadas que cuestionaban nuestro criterio de un perfil más popular del uso de la piscina cubierta. Este cambio y acercamiento del equipo de gobierno a un planteamiento más próximo a nuestro posicionamiento, nos permite apoyar esta normativa con lo que nuestro voto será favorable”, adelanta su portavoz, Cristina Valderas.

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