La Iglesia se apunta al ‘todo’ incluido

Como si del mejor festival, eso sí, de patrimonio, se tratara, la Iglesia se apunta al todo incluido. La Diócesis pone a la venta una pulsera, personal e intransferible, por ocho euros y sin caducidad que permitirá la entrada a la Catedral y a las iglesias de San Nicolás, San Gil y San Esteban-Museo del Retablo. La campaña empezará este sábado y se alargará hasta el 1 de noviembre abarcando los meses de más turismo en la capital.Este tique conjunto se venderá en cada uno de los templos y se espera añadir más puntos en función de su éxito.«El objetivo fundamental es poner en valor nuestro patrimonio religioso», observa el delegado diocesano de Patrimonio, Juan Álvarez Quevedo, quien también ve este nuevo recurso como un vehículo para aumentar el turismo y conseguir esa hazaña tan perseguida por los representantes municipales de sumar más pernoctaciones. «Puede ayudar a que los visitantes se queden en Burgos más noches, visitar un día la Catedral, otro día una iglesia... y pagando menos», destaca al tiempo que matiza que, mientras no se caiga de la muñeca, posibilita la visita al mismo monumento las veces que se quiera.Y no hace falta sacar la calculadora para ver que económica sí sale. La entrada general a la Catedral cuesta siete euros y dos a cada uno de los tres templos que la acompañan en este viaje.

No se quedan ahí las bondades de esta campaña. Esta apuesta por el patrimonio y por la actividad turística creará tres nuevos puestos de trabajo, dos en San Gil y uno en San Esteban, que se suman al que ya existe en San Nicolás y a los de la Catedral.Matiza Álvarez Quevedo que estos empleados no serán guías, sino que solo controlarán el acceso, pero aclara que podrían hacerlo según un nuevo decreto de la Junta «que permite a los titulares y a los trabajadores explicar estos lugares si tienen la preparación necesaria».

La Diócesis no ha hecho cuentas de los ingresos que esta iniciativa reportará a sus arcas, aunque su ecónomo, Vicente Rebollo, sí reitera que su meta es hacer más atractivos estos monumentos, aumentar las visitas y generar más recursos económicos para reinvertirlos en su conservación. En 2015 pasaron 350.000 personas por la Catedral, 12.500 por San Nicolás y 5.000 por San Esteban -San Gil no estaba abierta al turismo-.Puertas abiertas

El lanzamiento empezará esta tarde y mañana con puertas abiertas a las iglesias, no a la Catedral, para que los burgaleses puedan promocionar sus tesoros y «ser nuestros principales embajadores».

Esta pulsera festivalera no anula las entradas individuales a cada monumento, que seguirán a la venta, así como una tarde gratis a la semana.

Cuarteto de templos para una visitaCatedral. El templo Patrimonio de la Humanidad, principal atractivo cultural y turístico de la capital, no necesita presentaciones. Abre todos los días de 9.30 a 19.30 horas y la entrada es gratuita los martes por la tarde.

San Nicolás. A la sombra de la Seo se ha hecho grande esta iglesia que por fuera no enseña los tesoros que guarda en su interior. Desde su retablo en piedra de Hontoria obra de los Colonia a su sala de tapices, con 16 piezas únicas. Horario: de 11.30 a 14 y de 16.30 a 19 horas. Cerrado los miércoles y gratuito los lunes.

San Gil. La más desconocida por los turistas, pero no la más pobre. En su interior está la huella de importantes artistas de distintas épocas como los Colonia, Juan de Vallejo, Gil de Siloé o Gregorio Fernández. Se puede visitar de 10 a 14 y de 16 a 19 horas, salvo los martes, y de forma gratuita la tarde de los miércoles.

San Esteban-Museo del Retablo. Sin culto, desde los años ochenta alberga el Museo del Retablo, con una colección de retablos y orfebrería de toda la provincia, que pronto se ampliará con una sala dedicada a la Virgen y más a largo plazo espera hacerlo al claustro y otras estancias. Abre de 10 a 14 y de 16 a 19 horas (la tarde de los jueves es gratuita) y cierra los lunes.