Instituto de la Lengua
Las letras burgalesas se quedan fuera de la final del Premio de la Crítica de Castilla y León
Este viernes se presentaron en el Palacio de la Isla las diez obras literarias que optarán a llevarse la XXII edición del galardón regional / El ganador se dará a conocer el próximo 26 de marzo

La viceconsejera de Acción Cultural, Mar Sancho, y el director del Instituto de la Lengua, Andrés Abajo, presentaron las obras finalistas.
El Premio de la Crítica de Castilla y León, que organiza el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, es un galardón que va ganando prestigio con el paso de los años. Su repercusión entre escritores y editores y la atención que le prestan muchos lectores hacen que el ganador de cada edición obtenga un notable prestigio y, a veces, una segunda vida para su obra. Un buen ejemplo de ello fue el autor laureado el pasado curso, el vallisoletano Alejandro Cuevas, cuya novela ‘Literatura barata’ (Menoscuarto) había sido publicada casi un año antes de obtener el premio y regresó a los escaparates de las librerías tras su consecución.
«Este premio reconoce la mejor obra literaria escrita por un autor de Castilla y León en 2024. Llegamos ya a la vigesimosegunda edición, un certamen referente en el panorama literario español», señaló la viceconsejera de Acción Cultural, Mar Sancho, que presidió el acto en el Palacio de la Isla junto al director del Instituto de la Lengua, Andrés Abajo.

Cultura
El escritor vallisoletano Alejandro Cuevas, XXI Premio de la Crítica de Castilla y León
Alberto Marroquín
Los libros seleccionados son de muy variado estilo y género: narrativa, tanto en la vertiente de novela como de relato, poesía, teatro y ensayo. El jurado de este año vuelve a estar compuesto por «críticos literarios, periodistas, profesores y eruditos en torno a la literatura, pero que en este momento son lectores, principalmente», señaló Mar Sancho.
Otro de los aspectos que destacó la viceconsejera es «el nivel de nuestros autores que, además en esta ocasión, van con pujanza de voces reconocidas pero también con voces nuevas dentro de la literatura de Castilla y León» y añadió que en los últimos años la vocación del premio también es «dar impulso a carreras literarias y no tanto reconocer a los grandes genios de nuestra literatura, impulsar esas carreras que todavía no están tan consolidadas y dar un paso a estos autores a nivel nacional e internacional».
La viceconsejera presumió de que Castilla y León es una «tierra de buenas letras» y reseñó que de los 42 premios Cervantes entregados hasta la fecha, siete son autores de la comunidad. El último, el escritor de Villablino Luis Mateo Díez, que lo obtuvo en 2023.
El fomento y la internacionalización del sector editorial de la comunidad es otro de los objetivos que se ha marcado en los últimos años el Instituto de la Lengua. Entre los diez finalistas al Premio de la Crítica de 2024, la mitad ha sido publicados por sellos de la región. «Las editoriales de Castilla y León siguen apostando por los autores de nuestra tierra y eso es algo que nos complace», aseveró Mar Sancho y recordó que desde el Instituto de la Lengua se está dando visibilidad en ferias tan destacadas como la de Guadalajara (México) o Frankfurt (Alemania) a las editoriales y a los escritores de la región.
Los diez finalistas
Entre los cientos de libros publicados por autores de la comunidad, diez han sido los títulos más valorados, según el criterio del jurado, para ser merecedores de estar en la final. El miércoles 26 de marzo se reunirán los catorce miembros del tribunal de expertos en el Palacio de la Isla de Burgos para, tras sus deliberaciones, otorgarán el galardón a la obra más votada.

Andrés Abajo y Mar Sancho, con los libros finalistas del XXII Premio de la Crítica de Castilla y León.
La relación de títulos finalistas, citados por orden alfabético, son ‘Dice la sangre’ de Rubén Abella (publicado por Menoscuarto), ‘Las brujas de Zarapayas’ de Daniel Cruz Sagredo (Diputación Provincial de Salamanca), ‘La belleza de lo bienaventurado’ de Asunción Escribano (Eolas), ‘Parque temático’ de Luciano García Lorenzo (Ñaque Editora), ‘Ropa tendida’ de Óscar García Sierra (Anagrama), ‘Tampoco yo soy un robot’ de Amalia Iglesias (Vaso Roto), ‘Relatos de Celtiberia’ de Hernán Ruiz (Prames), ‘Laberinto mar’ de Noemí Sabugal (Alfaguara), ‘El que menos sabe’ de Tomás Sánchez Santiago (Eolas) y ‘La hora del abejorro’ de Ángela Segovia (La Uña Rota).
Las letras burgalesas no están representadas en la decena de obras finalistas de este 2024 que, una edición más, está encabezada por la inagotable cantera de escritores leoneses, que comparecen con tres títulos. Por el momento, la literatura burgalesa tendrá que seguir presumiendo de los dos galardones obtenidos años atrás por Óscar Esquivias y su novela ‘Inquietud en el paraíso’ en 2007 y por el recordado José Antonio Abella en 2014 por ‘La sonrisa robada’.