El Correo de Burgos

FÚTBOL / División de Honor Juvenil

El Ferroplás impone su mejor juego

Venció al Danok Bat en un partido que tuvo claro color naranja / Los visitantes marcaron en su primera ocasión de peligro, pero nunca tuvieron opciones reales de conseguir un resultado positivo / El cuadro local sentenció en el tramo final del choque

Burgos

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FERROPLÁS BP    4

DANOK BAT    1

Ferroplás Burgos Promesas: Carlos, Samuel, Pibe, tabares 8adri, min. 70), diego Rico, Oli (Josu, min. 70), Bellido, Turzo, Rodri (Paris, min. 88), Guti (Márques, min. 84) y Marti.

Danok Bat: Iñaki, Crespo (Jagoba, min. 86), Jon, Cota, Izkander, Ander, Gorka, Javi (Gaiska, min. 75), Aitor (Asier, min. 62), Sergio (Peio, min. 62) y Álvaro.

Árbitro: López Cuesta (Burgos). Mostró tarjeta amarilla al local Samuel, así como al visitante Javi.

Goles: 1-0, min. 6: Bellido. 2-0, min. 51: Guti. 2-1, min. 69: Ander. 3-1, min. 86: Márquez. 4-1, min. 92: Turzo.

R. MENA / Burgos

El Ferroplás Burgos Promesas se impuso de forma contundente a un Danok Bat que se mostró siempre inferior a los burgaleses. Sólo un gol visitante mediado el segundo tiempo y en la primera aproximación con peligro de los bilbaínos puso cierta incertidumbre en el marcador (2-1), aunque en ningún momento el conjunto naranja sufrió para mantener el resultado. Con estos tres puntos el equipo castellano se asienta en la zona alta de la tabla clasificatoria (en estos momentos es quinto) y sigue pisando fuerte en una de las categorías más exigentes del fútbol español. La permanencia está asegurada, por lo que el Promesas deberá de ponerse nuevos retos de aquí al final de la campaña.

Desde el pitido inicial se pudo comprobar que el Ferroplás estaba un escalón por encima de su oponente. Pese a jugar con el viento en contra se hizo con el control del balón  y del juego ante un rival que no acababa de entrar en el partido. Fruto de estas circunstancias llegó el primero. Los de casa botaron un saque de esquina Iñaki dejó su despeje en la frontal y Bellido con un sutil toque superó con una preciosa vaselina al guardameta vasco.

El Promesas encarrilaba el encuentro a las primeras de cambio y lo mejor de todo es que su contrincante no daba signos de vida. En el 12, Oli estuvo cerca de conseguir el segundo, pero cuando lo tenía todo a su favor, no acertó con la portería bilbaína. Poco después un saque de esquina que botó Martí estuvo a punto de colarse en la portería del Danok Bat, aunque Iñaki reaccionó a tiempo.

El conjunto de Pedro Medina era mejor, tenía el balón, lo jugaba con más criterio, no pasaba apuros en las labores de contención y llegaba con cierta asiduidad a las inmediaciones del área visitante. Los minutos fueron pasando sin que nada de interés sucediera sobre el terreno de juego. Pese a la superioridad local no llegaba el tanto de la tranquilidad y se llegó al descanso con la ventaja mínima para los naranja.

El Promesas dio un paso hacia adelante en la reanudación. Quería poner tierra de por medio y jugar con tranquilidad y sin agobios la última parte del partido. Los de casa sabían que necesitaban el segundo y llegó en el 51. Marti lo intentó desde el interior del área, Iñaki rechazó y Guti solo tuvo que empujar el balón al fondo de la red.

Llegaba el 2-0 y parecía que la sentencia, ya que seguía sin tener noticias del Danok Bat en ataque. En el 58 estuvo muy cerca de llegar el tercero del Ferroplás. Turzo y Samuel combinaron de forma sobresaliente, pero el remate del primero en el interior del área fue rechazado por el portero foráneo.

Que llegara el 3-0 parecía cuestión de tiempo y Marti y Diego Rico, en dos jugadas consecutivas, volvieron a estar cerca. Pero fue entonces cuando llegó la sorpresa. En la primera jugada trenzada de los locales en todo el partido Ander logró el 2-1 en el 69. Era el primer remate a puerta del Danok Bat en todo el partido y suponía su primer tanto.

Los de casa acusaron el golpe y les costó rehacerse, aunque el tramo final del choque tuvo claro color naranja. En el 79 Bellido mandó un libre directo al palo, mientras que 7 minutos después Márquez, que acababa de entrar al campo, hacía el gol de la tranquilidad tras aprovechar un balón suelto en el área. La guinda llegó en el descuento, cuando Turzo hizo el cuarto de cabeza a la salida de un saque de esquina.

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