Álvaro Ibáñez triunfa en Eslovaquia

os éxitos siguen ligados a la carrera de Álvaro Ibáñez, burgalés que forma parte del equipo español junior. El tirador de la Saesbu logró la victoria con el combinado nacional en la prueba de Copa del Mundo que se celebró este fin de semana en Bratislava, capital de Eslovaquia. Este triunfo sitúa a España como número uno en el ranking mundial, otro logro para el palmarés del joven local. El conjunto rojigualda llegó a la cita como uno de los favoritos para hacerse con la victoria y desde el primer momento asumió este papel. En cuartos de final tuvo que enfrentarse a un duro oponente, Israel. Los españoles lograron la victoria en el último minuto por un ajustado 43-42. Ya en semifinales, Alemania era el oponente del equipo español, aunque en esta ocasión el camino fue más sencillo y la balanza caía del lado español por 45-40.

Álvaro Ibáñez y sus compañeros se encontraron en la final con la todopoderosa Francia, aunque España volvió a vencer gracias a un gran esfuerzo y una perfecta táctica. El burgalés fue aportando su granito de arena en cada relevo y Julen Pereira, número uno del mundo en la categoría junior, puso el toque de calidad en una selección que supo afrontar un encuentro lento en el que logró el triunfo por 45-41.

En la competición individual, el burgalés no pudo destacar. Logró cuatro victorias en las previas, lo que le aseguró entrar en el cuadro de 256. Primero se deshizo de su compañero de selección Ángel Fabregat 15-11,, lo que le permitió meterse entre los 128 mejores. Luego tuvo enfrente a un italiano. El combate fue tremendamente igualado y se llegó al final con un marcador de 10-10. Fue entonces cuando el representante castellano tiró de sangre fría para lograr el pase al cuadro de 64. Fue entonces cuando se cruzó en su camino el húngaro Thot, uno de los esgrimistas más destacados de la categoría que impidió que continuará en competición. Ibáñez acabó finalmente en el puesto 51º.

Asimismo, el equipo femenino de la Saesbu se desplazó a tierras francesas, concretamente a Grenoble. Carlota Gil, Sofía Bueno y Mónica Merino se enfrentaban a su primera salida internacional. En un principio se enfrentaron a un sistema de dos vueltas clasificatorias, donde las locales pasaron sin excesivos problemas.El cuadro de 128 se convirtió en el verdugo de las burgalesas, que fueron cayendo una a una. Los técnicos del conjunto burgalés dieron por bueno el resultado, ya que las tiradoras están en pleno proceso de aprendizaje y la temporada no ha hecho nada más que empezar. Su objetivo en la competición gala era adquirir experiencia.