Balonmano / Asobal
Empate y gracias ante Teucro
El Villa de Aranda no pasa del empate en la pista del colista / Los de Jacobo Cuétara no encuentran sus señas de identidad y están perdiendo fuelle en el tramo final
No atraviesa un buen momento de forma el Villa de Aranda, que dejó escapar ayer la oportunidad de regresar a la senda del triunfo ante el farolillo rojo de la tabla clasificatoria en la Asobal. Minimizó daños y arrancó un empate en la cancha de un necesitado Teucro (30-30).
El combinado arandino no veía la hora de cambiar la dinámica tras el inesperado tropiezo del pasado miércoles frente a Benidorm, ante quien perdieron su condición de invicto en el Príncipe de Asturias.
Y quería evitar cualquier susto de última hora, por lo que apretó el acelerador de salida. Los de Jacobo Cuétara marcaron el territorio en Pontevedra desde la primera acción, siempre llevando la iniciativa en el luminoso, si bien los gallegos, que se jugaban media vida en el envite, eran capaces de enjugar la renta a base de casta.
Aún así, y con una aportación ofensiva de la práctica totalidad de los jugadores en pista (incluidos los canteranos Guillermo y Adrián), el cuadro burgalés intentaba abrir brecha (7-10).
Los gallegos intensificaron su agresividad en la retaguardia para evitar que el Villa de Aranda se escapara en el marcador. Y el duelo se atascó por momentos.
No le quedaba otra a los visitantes que seguir el ejemplo local en vista de la situación si querían evitar problemas (12-12). Cuétara no estaba nada satisfecho con el juego de los suyos y solicitó un tiempo muerto para leer la cartilla a sus pupilos. Los empates e intercambio de golpes se sucedían en el luminoso. Javi Muñoz tomó el mando de las operaciones, pero el conjunto ribereño no se encontraba cómodo sobre la pista y el duelo se había convertido en un correcalles. En esta tesitura se llegó al descanso con tablas (17-17).
Moreira y Moyano volvieron a poner por delante al Villa de Aranda en la salida del segundo acto, pero fue un espejismo, pues el Teucro reaccionó de inmediato con un parcial de 3-0 que le puso por delante por vez primera en el partido (21-20). Cuétara paró el partido para dar instrucciones. Y la reprimenda que no pareció servir de mucho, pues los gallegos parecían más metidos en el choque. La igualdad campeaba en el tanteador. Y el marcador se movió en un pañuelo hasta el momento decisivo, con mínimas ventajas burgalesas.
A dos minutos para el final, con 29-29 en el tanteador, Cuétara agotó sus tiempos para preparar el momento decisivo. Oswaldo anotó acto seguido, pero Teucro respondió de inmediato. Y el marcador ya no se movió más.