RUGBY / División de Honor B
Un sofocón para empezar
El UBU Colina Clinic reacciona en los últimos 20 minutos para salvar una tarde en la que se mostró incómodo / Las patadas del debutante Bianco premiaron el esfuerzo local
David Martín salva el placaje del pilier vizcaíno Tera, ayer, en San Amaro.-ISRAEL L. MURILLO
UBU COLINA CLINIC 28
DURANGO 20
UBU Colina Clinic: Valverde, Fuente, Caballero (Obregón, min. 56), Carrasco, Ashcroft-Leigh, Djosseu, Aristemuño, Snyman, Rocamán, Bianco, Santi Sánchez, Domínguez, Sáez, Imo y Martín. Durango RT: Tera, Blanco (Zubia, min. 74), Apellániz, Astarloa (Apraiz, min. 56), Iker Herce, Iraeta, Iriondo, Zorion Zabala (Unai Herce, min. 62), Iker Zabala (Gascón, min. 72), Azurmendi, Ormazabal, Fernández, Beitia (Lavilla, min, 41), Alberdi, Iturriaga. Árbitro: Rodríguez Noriega (Asturias).
Tarjetas amarillas: Al local Bianco en el minuto 35 y al visitante Alberdi en el minuto 79.
Tarjetas rojas: No hubo.
Tanteo: 0-3, min. 5: golpe de castigo de Iturriaga, 5-3, min. 7: ensayo de Domínguez; 12-3, min. 11: ensayo de Martín que transforma Imo; 12-10, min. 25: ensayo de Iraeta que transforma Iturriaga; 12-17, min. 39: ensayo de Blanco que transforma Iturriaga; 12-20, min. 56: golpe de castigo de Iturriaga; 15-20, min. 60: golpe de castigo de Bianco; 18-20, min. 66: golpe de castigo de Bianco; 21-20, min. 72: golpe de castigo de Bianco; 28-20, min. 79: ensayo de castigo que transforma Bianco. BURGOS
El UBU Colina Clinic se asomó al precipicio, pero salió airoso del problema y estrenó el curso con una victoria fundamental en sus ambiciosas aspiraciones. El conjunto gualdinegro quiere lo máximo y el éxito pasa por cumplir con el objetivo cada fin de semana sin importar las circunstancias.
El nuevo proyecto necesita tiempo de maduración. El bloque debe afianzarse, adaptarse a la filosofía de Marcelo Chorny y acoplar las nuevas piezas. Y es que jugadores como Imo y Snyman debutaron ayer menos de 48 horas después de llegar a Burgos. Además, otros hombres clave como Sooialo y Wagenaar aún no se han incorporado al grupo. Demasiados condicionantes. Sin embargo, cuando el oval está en juego, nada de eso importa.
Los burgaleses salvaron una victoria que peligró durante varias fases. El Durango aún se pregunta cómo se le escapó un partido que tuvo controlado hasta el minuto 60, pero lo cierto es que la reacción castellana en el tramo final fue meritoria. Los de San Amaro evidenciaron que tienen un gran margen de mejora, pero también mostraron virtudes individuales y en algunos aspectos colectivos como la melé.
Los vascos pusieron las cartas boca arriba desde el arranque. El cuadro visitante confiaba gran parte de sus opciones en las patadas de Iturriaga, tanto en los lanzamientos a palos como en la salida del juego. El ‘10’ vizcaíno falló en su primer intento desde el tee, pero en el segundo no perdonó. Y solo habían pasado tres minutos de juego.
El UBU Colina Clinic respondió a renglón seguido. Los gualdinegros se plantaron en campo contrario y mostraron dinamismo en sus acciones liderados por Imo. Un robo de Jorge Fuente en la touch fue el inicio de una buena transmisión culminada junto al banderín por Rubén Domínguez. A continuación, Santi Sánchez abrió la puerta por el centro para romper la defensa rival. La acción continuó y esta vez fue David Martín quien posó en idéntica posición que su compañero.
Habían pasado 10 minutos y el UBU Colina Clinic vencía por 12-3. Parecía que el bloque de San Amaro había dado con la tecla, pero poco a poco el ritmo decayó. Los constantes golpes de castigo sancionados, las indisciplinas y las precipitaciones cometidas frenaron al bloque de Marcelo Chorny para alegría de un Durango siempre favorecido por las circunstancias del juego.
La iniciativa era vasca y los burgaleses comenzaron a sentirse incómodos. Tanto, que en el 25 redujeron la desventaja hasta el 12-8 y lo peor estaba por llegar. El UBU Colina Clinic se limitó a achicar agua hasta el descanso, sobre todo después de quedarse con un hombre menos durante 10 minutos tras una nueva infracción de Nicolás Bianco.
El centro después resultó clave en la victoria, pero en ese momento los anfitriones acusaron el golpe y no pudieron evitar un nuevo ensayo de la delantera rival en la última acción de la primera parte (12-17).
El partido se ponía feo para un UBU Colina Clinic que pisó el acelerador en el arranque del segundo acto. Los de Chorny adelantaron su presión, pero sin suerte. Imo falló una patada sencilla y centrada y el ímpetu gualdinegro dio paso a una nueva fase de control blanquiazul.
El Durango tenía las ideas claras y, otra vez, su buen hacer se veía reforzado por las continuas faltas que el árbitro señalaba a los de casa. El UBU Colina Clinic corría el riesgo de irse del partido y un nuevo pateo de Iturriaga encendió todas las alarmas (12-20).
Fue entonces cuando la maquinaria comenzó a funcionar. El número de infracciones se igualó, el UBU Colina Clinic gozó de más continuidad y llegó a línea de 22. Bianco sustituyó en el lanzamiento a palos a un desacertado Imo y tres pateos del argentino dieron la vuelta al marcador justo a tiempo.
Los de Chorny supieron jugar los últimos minutos con la ventaja mínima (21-20) y un ensayo de castigo en una acción en la que Fuente se quedó a un palmo de la línea de marca confirmó una victoria tan sufrida como importante. Y esto solo acaba de empezar.