El Correo de Burgos

Universidades y empresas reiteran su rechazo al Estatuto del Becario

La Redfue se reúne en Burgos para perfilar su 'Libro Blanco', un «código de buenas prácticas» frente al borrador de Trabajo que busca el «consenso con todas las partes implicadas»

Fernando Martínez Gómez (Redfue) y Manuel Pérez Mateos (UBU).

Fernando Martínez Gómez (Redfue) y Manuel Pérez Mateos (UBU).TOMÁS ALONSO

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El Estatuto del Becario, todavía pendiente de entrar en vigor pero con las cotizaciones ya en marcha, continúa generando un tira y afloja entre el Ministerio de Trabajo, la patronal y el mundo académico. En primera línea de oposición a la futura norma se encuentra la Red de Fundaciones Universidad-Empresa (Redfue), que este miércoles ha reafirmado su inquietud durante una reunión de trabajo en la Universidad de Burgos (UBU)

Antes del encuentro, el presidente de la Redfue, Fernando Martínez Gómez, avanzaba la intención de perfilar el Libro Blanco que ya circula por los ministerios implicados y los partidos políticos con representación parlamentaria. Se trata, según ha explicado, de una «guía de buenas prácticas» que recoge una serie de «propuestas de mejora» que aún no han trascendido a la opinión pública. 

Lo que sí ha querido poner de manifiesto es que «no tiene sentido hablar de contratos cuando se están realizando prácticas formativas». Ese es, precisamente, el principal escollo para la entidad en relación al Estatuto del Becario, lo cual no quita para que «las universidades estemos perfectamente de acuerdo en que se cotice a la Seguridad Social», añadía el rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, enfatizando así el «desacuerdo» latente a la hora de gestionar las cotizaciones. 

«No nos lo han puesto fácil», esgrimía el rector tras subrayar que en los últimos meses se ha producido «un caos que las universidades hemos conseguido resolver con eficacia». Por otro lado, ha señalado que la UBU, al igual que otros centros, «recibe instrucciones contradictorias» sobre cómo se debe proceder a la hora de gestionar las prácticas. «Hay cierta desinformación, pero no es culpa de la Universidad», apostillaba después de tildar «de locos» una situación en la que «estamos trabajando sobre la marcha».  

Más allá de la bonificación del 95% de las cotizaciones a la Seguridad Social de los becarios, Pérez Mateos advertía que «el coste que asume la Universidad es menor, pero la gestión es compleja y cara». En este sentido, la Redfue pone de manifiesto la dificultad que entraña hacer frente a tantas altas y bajas en un periodo muy corto de tiempo. Según Martínez Gómez, «no se puede legislar sin escuchar». Aparte, ha asegurado que más del 86% de los becarios son posteriormente contratados si la empresa en cuestión tiene necesidad de ampliar su plantilla. 

No en vano, el presidente de la Redfue ha insistido en que el Libro Blanco debería servir para alcanzar un «consenso con todas las partes implicadas». Aquí entran en juego, y de hecho han participado en la elaboración de este documento, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), las patronales CEOE y Cepyme o la Conferencia de Consejos Sociales.

Pocas novedades con la EBAU

Los cambios introducidos en la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), cuya coordinación en Castilla y León recae este año sobre la UBU, no arrojan por el momento «ninguna novedad significativa». Y las pocas que hay son «a nivel técnico».

Consciente de que la EBAU «cada vez se complica un poco más», el rector ha señalado que se está «informando puntualmente» tanto a los orientadores como a los alumnos. Sin embargo, poco más se conoce sobre una prueba clave para el futuro de muchos estudiantes.

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