El turismo rural suma y sigue: inicia el año con un 15% más de pernoctaciones
Tras dispararse el número de viajeros en 2023, el sector mantiene el alza en el primer cuatrimestre de 2024. El aumento de visitantes nacionales suple la caída de extranjeros y eleva el total a 37.324 entre enero y abril

El turismo rural es motor de desarrollo económico de numerosos pueblos de la provincia.
Lejos de estancarse y fijar una velocidad de crucero tras destrozar su techo el año pasado, los alojamientos de turismo rural de la provincia suman y siguen. Eso al menos cabe inferir de los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística, que otorgan al sector un arranque de 2024 de excepción, al superar el incremento de récord registrado en el primer cuatrimestre de 2023 no solo en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, marcado quizá aún por la pandemia, también, de lejos, respecto a 2019, cuando el impacto del coronavirus ni se intuía aún.
En concreto, el turismo rural burgalés recibía 37.324 viajeros entre enero y abril, un 13% más que los ya destacados 32.781 que sumó en estos cuatro meses del año pasado. Ni siquiera el descenso del visitante extranjero, de 4.654 a 2.994, nada menos, ha afectado al volumen total. Lo compensaba con creces el alza del cliente nacional. Subía un 22% y elevaba los 28.127 de 2023 al histórico dato total de 34.332.
A modo de referencia, la estadística prepandemia se ubica a distancia de la actual, con 23.517 viajeros en total en el primer cuatrimestre de 2019, 21.269 españoles. Llama la atención, sin embargo, la bajada de la estancia media registrada. Si entonces alcanzaba los 2,25 días, ahora ronda los 2,1, por encima, eso sí, del dato de 2022 y 2023.
Más todavía que el número de turistas que optan por un alojamiento rural crecían en el último año las pernoctaciones acumuladas. Suben un 15% entre enero y abril de 2024 respecto a 2023, al pasar de 70.520 a las 81.464 conocidas ayer. Dista este incremento, con todo, del superior al 42% con el que arrancaba 2023 al pulverizar las 49.462 noches acumuladas al término de abril, cifra por debajo incluso de las 52.779 de 2019.
En este caso también se refleja la menor presencia de visitantes extranjeros, pero el descenso es más contenido: sus pernoctaciones se reducen de 6.616 a 5.448, mientras que las de ‘casa’ se elevan de 63.904 a 76.016. De nuevo, compensan el saldo total, que resulta más que positivo.

Burgos
El tirón de los apartamentos turísticos se consolida y dispara las plazas en un año
Laura Briones
Al calor de esta tendencia al alza, o viceversa, parece moverse la estadística referida a número de establecimientos, plazas y puestos de trabajo generados. El aumento, de hecho, es paulatino por tradición en los primeros meses de cada año. Enero registra, por norma, menos alojamientos operativos que abril. No obstante, el de 2024 se lleva el récord, de momento, con 438 negocios, supera a los 415 de marzo, hasta el momento el dato más alto en esta época de año, en la que la Semana Santa desencadena el despertar de la actividad turística.
Crecen también las plazas ofertadas en suma, hasta 4.819 en la provincia, lo que implica una subida de un 3% más en apenas un mes y hasta de un 21% respecto al último abril prepandémico.
En mayor medida ha aumentado en el último lustro el volumen de empleo que exige este florecimiento del turismo rural. Y es que las 717 personas que tienen en la actualidad un vínculo laboral con el sector son un 46% más que las que trabajaban en estos negocios al cierre del primer cuatrimestre de 2019.
De vuelta a los datos de viajeros y pernoctaciones, esta vez por meses, la estadística arroja un descenso leve en abril. No alcanzan, por poco, sus 13.732 turistas acumulados a los 14.100 de marzo, ‘estimulado’ por las vacaciones de Semana Santa. Nada que ver con la distancia que, por el contrario, evidencian otros ejercicios. Sin ir más lejos el año pasado, el tercer mes sumó 7.472, menos de la mitad de los 16.207 del cuarto.
Apartamentos y campings
La encuesta de ocupación de alojamientos extrahoteleros detiene el foco también en los apartamentos turísticos, cuyo tirón también crece. En el primer cuatrimestre del presente año los usuarios de estos espacios en la provincia ascendieron a 9.860, un 17,5% más que los 8.386 de 2023. No llegan a tal incremento las pernoctaciones, aunque también suben de 16.479 a 18.932, un 15%. La comparativa mensual también refleja un descenso de los 3.783 viajeros de marzo a los 2.990 de abril. Lo mismo ocurre con las noches contratadas, que caen de 7.291 a 5.260.
Los campings, por su parte, se nutren en el arranque del año de viajero extranjero, lo eran de hecho 9.188 de los 12.803 usuarios en el primer cuatrimestre. El dato global, en la línea de los anteriores, también supone un incremento anual.