Amepax suma más de 300 casos resueltos con justicia restaurativa

El servicio de Justicia Restaurativa, que ofrece la Sociedad Científica de Justicia Restaurativa en colaboración con el Servicio de Justicia Restaurativa de Castilla y León (Amepax), suma, en los 18 años que ya lleva en funcionamiento, 314 asuntos resueltos, entre los destacan las infracciones relacionadas con lesiones, amenazas e injurias. Aunque también se han resuelto casos relacionados con hurtos.

El servicio recibió el pasado año un total de 17 asuntos, de los que finalmente se trabajó en 16, con un resultado de 14 resueltos de forma satisfactoria. En cuatro de ellos eran asuntos relacionados con delitos, resueltos los cuatro con éxito, los otros 12 estaban relacionados con delitos leves.

Los delitos y delitos leves sobre los actuó la Justicia Restaurativa fueron las lesiones, hurtos, robos, injurias, amenazas y daños. Destacan sobre los demás los delitos de lesiones, seguidos de las amenazas y los hurtos, aunque en la memoria se indica que algunos delitos llevan aparejados dos clases de delitos leves.

En la mayoría de los casos, los tipos de acuerdo en general conllevan un componente moral, es decir, «compromiso de no volver a repetir conductas similares, petición de disculpas, acuerdos de convivencia», tal y como se recoge en la memoria.

Entre las conclusiones principales que se extraen de este periodo es que la mayoría de las víctimas no buscan un resarcimiento económico. En algunos casos, «solo quieren ser escuchadas, desahogarse y obtener respuestas», otras buscan «recuperar su sentimiento de seguridad». De ahí que muchos acuerdos entre la persona ofensora y la víctima sean de tipo moral, es decir, que se establece el compromiso de no volver a hacerlo. Otro tipo de reparación que se busca es poder contar su historia, para lo que la asociación ofrece programas individuales, tanto para víctimas como para ofensores. 

En la actualidad, se ofrece un servicio de justicia restaurativa, «pionero en España», de acompañamiento y apoyo a las personas que salen de prisión para favorecer su reinserción. La asociación ya desarrolló en el centro penitenciario de Burgos un programa piloto, llamado ‘Reconexión’, que buscaba la reconciliación del ofensor con la víctima, con la propia sociedad y con él mismo.

El pasado año se cerró el cuarto grupo del programa ‘Ave Fénix’, en el que se trabaja con víctimas de violencia sexual y de género y«está funcionando muy bien», explica Virginia Domingo, presidenta de la Sociedad Científica de Justicia Restaurativa y coordinadora de Amepax. También «hemos trabajado con víctimas de la Iglesia, así con víctimas de violencia sexual intrafamiliar». 

En estos casos no se realizan encuentros con la persona ofensora, lo que se hace es convocar a las personas que quieran participar a una sesión informativa y «les hablamos de que va a haber una serie de reuniones en las que van a tener la oportunidad de contar lo que quieran de su historia de daños, de sus necesidades no satisfechas».

En estos casos, lo que se busca es una «reparación creativa» y «muchas veces viene de ellas para ellas o de ellos para ellos». Ha habido víctimas que han escrito un cuento para prevenir el abuso infantil y «está teniendo mucho éxito». Otras han creado una fundación para que «otras personas no pasen por lo que ellas han pasado».

Han pasado prácticamente dos décadas desde que Virginia Domingo se convirtiera en una de las primeras personas que hablaba de la Justicia Restaurativa. Y pasado este tiempo, se muestra algo pesimista porque «he pasado de decir que la Justicia Restaurativa existe, porque nadie la conocía, a tener que decir que no todo es Justicia Restaurativa».

No todo es negativo, «por un lado está bien, porque la gente lo conoce, pero también llegan ideas sesgadas de lo que es la Justicia Restaurativa». De Domingo explica que es «mucho más que me tengo que encontrar con la persona ofensora». Hay políticos, añade, que «se los están apropiando y veo que venden la Justicia Restaurativa pero seguimos con los mismos problemas de financiación».

Domingo ha querido recoger en un libro publicado en agosto pasado, ‘La función transformadora de la justicia restaurativa’, todo este conocimiento teórico de estas dos décadas, acompañado de ejemplos prácticos para su aplicación.