El Correo de Burgos

El Cenieh y la UBU se unen para analizar ADN antiguo a final de año en Burgos

La investigadora Cristina Valdiosera realizará los análisis de ADN que forman parte de su proyecto AdMexture. «Analizaremos restos de hace 500 años de poblaciones prehispánicas y europeos para aclarar cómo fue el proceso de mestizaje»

De izquierda a derecha: María Martinón, Cristina Valdioseras, José Miguel García y Verónica Calderón durante la presentación de la nueva colaboración

De izquierda a derecha: María Martinón, Cristina Valdioseras, José Miguel García y Verónica Calderón durante la presentación de la nueva colaboraciónTOMAS ALONSO

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El Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh) y la Universidad de Burgos (UBU) unen sus fuerzas para colocar a Burgos como la capital más importante del mundo en el estudio de la evolución humana. De esta manera, han aprobado un acuerdo de colaboración entre ambas instituciones por la que la genetista Cristina Valdiosera, investigadora de la UBU, puedan desarrollar los estudios de ADN Antiguo en el laboratorio de Paleoproteómica cuya puesta en marcha ultima el Cenieh.

El laboratorio de Proteómica y ADN Antiguo del Cenieh ya culminó la obra de estanqueidad total iniciado a mediados de 2023. Inicia ahora la fase de adquisición del equipamiento necesario para realizar las pruebas. En cuanto al personal contará con Cristina Valdioseras para realizar estudios genéticos y en la parte de aislamiento de proteínas con Samantha Brown que ha desarrollado estos laboratorios de paleoproteómica en la Universidad de Tubinga y en el Instituto Max Plank de Alemania.

«Estamos en un momento no de subirse al carro, sino de tirar de él y esta línea de investigación que permite recuperar material biológico antiguo es un punto de inflexión», señaló la directora del Cenieh, María Martinón. Apunta como en 2020 el estudio de proteínas de Homo antecessor se hizo en Copenhague (Dinamarca). Aquello ya colocó la necesidad de avanzar en el desarrollo de estudios en paleoproteómica. «Aquello nos llevó a considerar que era el momento de tener tecnología, de hacer la formación y hacer los análisis en nuestro país, con nuestros equipos, con nuestra gente y con nuestras infraestructuras», señaló.

Así arrancó la construcción del Laboratorio de Paleoproteómica. Se planteó un añadido para «iniciar estudios de ADN antiguo para que, si se diera la oportunidad, estar preparados para desarrollar esa línea de investigación».

Y la oportunidad la ha puesto la Universidad de Burgos y la estancia en el Laboratorio de Evolución Humana de la UBU de Cristina Valdiosera que rastrea el origen genético de las poblaciones del pasado. En los últimos análisis sobre el primer enterramiento del Islam o de los agricultores europeos que volvieron a África hace 7.400 años las muestras se desarrollaron en la Universidad de Uppsala (Suecia).

A partir del finales de este año los estudios de ADN antiguo que Valdiosera y su equipo desarrollen sobre el origen del mestizaje entre poblaciones indígenas y europeos conquistadores de hace 500 años en México se llevarán a cabo en Burgos. «Hemos desarrollado un marco de colaboración entre instituciones en base a la Ley de la Ciencia y con el marco del convenio entre ambas instituciones que nos ha abierto un modelo de colaboración que permite multiplicar el resultado de los fondos públicos que ya tenemos», explicó el rector de la UBU, José Miguel García. 

¿Y si la historia del mestizaje no fue cómo nos contaron?

El proyecto de la investigadora de la UBU, Cristina Valdiosera, persigue certificar mediante datos científicos como fue el proceso de mestizaje en México desde un punto de vista genético y biológico pero, también desde un punto de vista social. 'Biocultural roots of diversity and inequality in Mexico: 500 years of mestizo stories' es un proyecto que el año pasado obtuvo la única beca ERC Advanced Grant conseguida por las universidades y centros de investigación de Castilla y León, y dotada con 2,5 millones de euros. 

«Las ERC Advanced son las de máxima excelencia porque de las 1.800 candidaturas presentadas en toda Europa se seleccionaron 255, solo cinco en universidades española y una es la que ha conseguido Cristina, con doble reconocimiento de la Unión Europea, y es de agradecer que confíe en la UBU porque son proyectos que corresponden al investigador no al centro», destacó García. 

Valdiosera ya cuenta con un equipo de tres personas para el desarrollo de su investigación. En el aspecto de análisis genéticos se realizaran estudios de adn antiguo de poblaciones indígenas de hace 500 años y las prehispánicas y las de poblaciones europeas que realizaron la conquista en la época. Es el proceso de mestizaje entre México y España cuando los europeos llegaron a las américas. «Sabemos qué ocurrió, lo que nos han contado de lo que pasó, un momento único en el que dos poblaciones se encuentran después de 20.000 años separados, muchos creen que pudo ser lo más cercano a un encuentro extraterrestre», señaló la investigadora mexicana y radicada en Burgos. 

De esta manera, Valdiosera espera ofrecer «una visión más inclusiva de este proceso, contándolo desde diferentes lentes y revisar las nuevas estrategias y metodologías para ver un registro más completo». Un mestizaje biológico y cultural que, en lo que al adn se refiere puede traer sorpresas. «A nivel genético esperamos encontrar pluralidad, siempre hemos pensado que era un encuentro entre españoles y mezoamericanos y eso es una visión simplista de este momento». Explica la científico del Laboratorio de Evolución Humana de la UBU que entre los que llegaron en barco desde España no todos tenían porqué ser españoles «podría haber africanos, europeos de otros países, solo sabemos que partieron de España». Entre las poblaciones prehispánicas «puede que no fuera una sola población y que estos pueblos autóctonos tuvieran una gran diversidad»

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