El Instituto de Investigación Biosanitario de Burgos, en marcha

La Unidad de Investigación del Complejo Asistencial del Hospital Universitario de Burgos (HUBU) trabaja en el desarrollo del nuevo Instituto de Investigación Biosanitario de Burgos (IBioBurgos) en colaboración con la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León (Sacyl) y la Universidad de Burgos (UBU). Un departamento que permitirá fortalecer la ciencia médica que se analiza y se investiga en el HUBU a través de la Unidad de Investigación y de la Fundación para la Investigación que empezó su andadura en los años 90.

«Estamos trabajando mucho para que todo salga adelante y, podemos decir en este momento, que estamos cumpliendo los plazos con un trabajo intenso y un estudio de los recursos con los que disponemos», comenta el jefe de la Unidad de Investigación del HUBU, Jorge Labrador. El instituto tendrá su sede en el Divino Valles, tal y como se avanzó en la reunión entre Sacyl y UBU para acordar su constitución.

El IBioBurgos permitirá por un lado ofrecer una «estructura y un soporte de investigación para todo el área de Salud de Burgos». Y, por otro lado, permitirá «obtener más recursos para investigar porque nos va a permitir concurrir a una serie de convocatorias que están reservadas para este tipo de institutos de investigación biosanitaria», remarca Labrador.

Esta infraestructura permitirá potenciar la investigación e innovación sanitaria en Burgos y su provincia, tanto en el ámbito básico y preclínico, como en el clínico y traslacional, sumando los recursos investigadores de la Universidad de Burgos -representados fundamentalmente por los grupos y las unidades de investigación consolidadas o los centros de investigación como el Centro de Investigación en Patógenos Emergentes-; el Complejo Asistencial Universitario de Burgos, el Hospital de Santos Reyes de Aranda de Duero, el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro, la Gerencia de Atención Primaria y el Servicio Territorial de Sanidad.

El IBioBurgos será, cuando esté en marcha, el cuarto de la región. Este tipo de estructuras organizativas del trabajo científico de la profesión médica se inició en Salamanca. Año tras año se han inaugurado en Valladolid y, en 2024, en León. Entre las líneas de investigación que se pretende abordar están las áreas que más trabajo científico genera a la Unidad de Investigación del HUBU como son hematología -incluida la pediátrica-, neurología, oncología o cardiología. 

También se abordarán cuestiones vinculadas a la salud pública (seguridad, alimentación o estilos de vida), farmacología, medicina de precisión, cuidados o cuestiones más tecnológicas como la bioingeniería, con aplicación al sector salud (industria 4.0) y el uso de la inteligencia artificial en el ámbito sanitario. Áreas en los que la UBU dispone de titulaciones implicadas tanto en su Facultad de Ciencias de la Salud o en la Escuela Politécnica Superior como es el caso de la Ingeniería de la Salud.

200 proyectos de investigación al año

Esta será una de las grandes novedades dentro del ámbito de actuación de la Unidad de Investigación del HUBU que presta servicio a más de 200 proyectos de investigación al año que desarrollan los médicos del centro hospitalario. El 80% de estos proyectos son observaciones en los que el paciente no interviene, sino que es una gestión de observaciones de los tratamientos. Pero también se abren unos 20 ensayos clínicos nuevos al año que implican ya una mayor actividad.

El trabajo de la unidad y la Fundación es la de dar soporte a estos proyectos de investigación. «Ofrecemos un apoyo a aspectos metodológicos, éticos y legales de los proyectos de investigación, también un asesoramiento de análisis e interpretación y gestión de los datos generados y todo el apoyo burocrático para que el profesional se dedique a investigar y tratar al paciente», señala Jorge Labrador.

En este ámbito la Unidad de Investigación, que puede desarrollar ensayos clínicos de fase 1, ofrece entre sus servicios el único animalario de Castilla y León para el desarrollo de medicina y cirugía experimental que dirige María Rodríguez Díaz. Disponen también de un laboratorio de técnicas instrumentales, un laboratorio de cultivos celulares, un biobanco, donde se almacenan l as muestras, y una sección vinculada a investigación clínica epidemiológica y estudios observacionales.

La labor de gestión burocrática es tan importante como la gestión de datos y realización de pruebas. Cuentan con un Comité de Ética e Investigación con Medicamentos de las áreas de Salud de Burgos y Soria, una Comisión de Investigación. Un equipo que desarrolla desde la identificación de proyectos de concurrencia competitiva y subvenciones a la gestión de acuerdos de trabajo en red con clúster, consorcios o asociaciones. Y también, en colaboración con fondos obtenidos por los propios proyectos de investigación, equipo específico para la gestión de datos.

Esta labor coordinada y una estructura marcada de la unidad han permitido incrementar el factor de impacto de la investigación sanitaria que se lleva a cabo en el hospital de Burgos. «Este indicador se ha multiplicado por siete, esto quiere decir que se ha aumentado la repercusión científica de la institución», señala Labrador. Profesionales de la medicina en Burgos están entre las 300 publicaciones en revistas científicas de alto impacto cada año. A ello hay que sumar el trabajo de la investigación en enfermería «muy activo en el hospital y que el año pasado se incluyó en el Nursing Research Challenge en el que están pocos hospitales de España, pero sí el de Burgos».