Michelin mantiene su apuesta por Castilla y León pese "haber sido unos años complicados"

No han sido años fáciles, pero Michelin reafirma su apuesta por las fábricas de Castilla y León. En la visita a la planta arandina de la consejera de Industria y Empleo, la directora general de Michelín España-Portugal, Paz Rovina, destaca el peso de estas factorías, que superan los 3.800 empleados, de los cuales 3.000 son trabajos directos. “Estamos invirtiendo, en los últimos años, cerca de unos 100 millones de euros año a año (en Castilla y León), incluso en estos años pasados, que han sido realmente complicados”.

Según detalla, “tenemos una importante entrada de productos que vienen de otros continentes, fundamentalmente asiáticos, que están invadiendo los mercados europeos y que hacen que, cada vez, nos resulte más complicado estar ahí”.

Pese a los retos, Michelin seguirá siendo, asegura, referente en innovación, digitalización y compromiso, apostando por fábricas como la de Aranda, donde se fabrican las “gamas premium”, es decir, “las gamas de más alto nivel para el neumático de camión”. “Michelin Aranda es bench (modelo) a nivel del grupo”.

Sobre las inversiones previstas, continúa, se mantienen en la línea de los últimos ejercicios, aunque advierte que “todavía hay decisiones por tomar, que pueden ir hacia arriba o hacia abajo”. En cuanto a la plantilla, aunque se han realizado contrataciones recientes, es “más o menos estable” y la evolución dependerá de la carga de trabajo.

Presión arancelaria, absentismo

Preocupada por el avance de los neumáticos low cost, la presidenta de Michelin alerta de la pérdida de competitividad de las plantas europeas frente a otras regiones del mundo. “Tenemos problemas de competitividad con otros continentes, fundamentalmente Asia. Hay factores económicos, de coste, como el absentismo, que se están uniendo y hacen que, cada vez, nos resulte más complicado estar ahí”.

Y aunque no dependen del mercado americano, la imposición de aranceles, advierte, puede afectar a las exportaciones directas, las que van a países europeos que, a su vez, exportan, y con un impacto general en las economías.

Impacto del apagón eléctrico

Una semana después del gran apagón eléctrico, la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, admite que aún no dispone de datos definitivos: “Estamos en contacto con las cámaras de comercio y con el tejido empresarial para conocer los efectos concretos”.

En el caso de Michelin, el paro afectó a todas las plantas de España, especialmente a Aranda, la última factoría en recuperar el suministro eléctrico. “Hemos perdido más de un día de producción en algunas fábricas”, señala, con un cálculo que ronda el millón de euros en pérdidas globales. “Al pararse de golpe, provoca desechos y pérdidas de materia en curso”, puntualiza.

Responsabilidad social

La consejera destaca la importancia de Michelin, “un pilar fundamental de la industria”. “Es una empresa de carácter internacional, pero con ese fuerte arraigo en Castilla y León, con esa apuesta por el empleo en nuestra comunidad autónoma”, señala consciente de que la mitad de las instalaciones que la multinacional tiene en España están en Castilla y León, una comunidad que aglutina el 40% de los trabajadores de Michelin.

En su opinión, la compañía del neumático es un ejemplo de creación de empleo y de empleo “de calidad”. Sus 3.000 trabajadores, 1.300 en Aranda, contribuyen sin duda a reforzar los datos de empleo de Burgos, una provincia donde la tasa de paro está casi tres puntos por debajo de la media nacional. “Es además la tercera provincia en empleo industrial dentro de España”, señala al recordar que el 25% del empleo en Burgos llega de la industria. “Michelin es también un ejemplo de buen hacer”, añade sin olvidar otros ámbitos donde también destaca como la exportación donde Burgos aglutina el 25% del total regional.

La consejera hace especial hincapié en la factoría arandina porque además de ser líder en la fabricación de neumáticos para camiones, ejerce como un centro de innovación que es referencia para todo el grupo Michelin “con proyectos de especial interés desde el punto de vista de la fabricación ecológica”. En este reto, asegura, Michelin cuenta con el apoyo de la Junta de Castilla y León, con una aportación de 740.000 euros.

La consejera destaca el compromiso de Michelin con la igualdad y la responsabilidad social: “No solo porque esté presidida por una mujer, sino también por su implicación en la red de empresas comprometidas con la igualdad en Castilla y León, con su Fundación Michelin, con esa colaboración con la Universidad de Burgos a través de la cátedra de transferencia del conocimiento, con la guía Michelin, etc. Es una empresa completamente responsable desde el punto de vista social”.

Por ello, reafirma el respaldo del ejecutivo autonómico: “El gobierno de Alfonso Fernández Mañueco en el pasado, en el presente y en el futuro ha estado al lado de la industria de la automoción”, un sector líder en crecimiento en exportaciones, con un 39% atribuible a la automoción.

Infraestructuras clave y desafíos

En este desarrollo, apunta, la Junta de Castilla y León ha contribuido con infraestructuras como el ramal ferroviario de Prado Marina, pero se mantienen demandas que dependen del Gobierno de España como “ese tren directo Burgos-Aranda-Madrid”, la “agilización del desdoblamiento de la N-122” o el desarrollo del corredor atlántico”.

En cuanto al futuro de la automoción, la consejera defiende la necesidad de “una transición justa, inteligente hacia la movilidad sostenible”, y exige “una política fiscal y arancelaria justa” para proteger la competitividad de la industria frente a otros mercados.