Ocampo marca el objetivo para el Tizona Burgos: 14 victorias para la permanencia

Partido especial en LEB Oro ayer para el entrenador del Grupo Ureta Tizona Burgos, Diego Ocampo, en el que acabó robando la cartera en el último minuto al Real Betis ante la afición sevillana, la misma que le dispensó su cariño en sus seis temporadas como técnico asistente en el Municipal de San Pablo de la capital hispalense.

Para un entrenador tan exigente, centrado y concentrado en su labor como Ocampo, afrontar el partido entre el Tizona y el Real Betis "ha sido muy difícil", admite.

"He visto mucha gente, muchas muestras de cariño y la verdad es que también me ha costado mucho concentrarme para el partido y tenía que prepararme muy bien. Esas muestras de cariño son de agradecer. Fueron seis temporadas muy buenas y creo que fueron muy buenas gracias al trabajo de equipo y a la buena conexión que había en el equipo y a la continuidad", recuerda el técnico del conjunto azulón.

Pero metidos en harina, con el partido tremendamente igualado y todo por decidir en los minutos finales, ni Ocampo ni sus jugadores estaban para sentimentalismos. Sólo para competir.

La prueba está en el minuto y medio de gran juego del Tizona en las postrimerías del encuentro en el que se sobrepone de tiros libres fallados, triples que no entran y rebotes disputados para sacar faltas, anotar y mantenerse pegados al Betis al que esta vez le falló la suerte, a juicio del técnico gallego. Una canasta salvadora de Jacobo Díaz inclinó la balanza y dio la victoria a los azulones.

Pero por mucho que la fortuna cayera del lado azulón, sin trabajo no hay recompensa y anoche el Tizona ganó al Betis en el último suspiro "porque el equipo lucha mucho", analiza Ocampo. "No nos rendimos, jugamos con confianza y eso permite ser competitivos", insiste y reitera que ante el Betis el equipo burgalés tuvo "la suerte de cara, que hay que agradecerla cuando la tienes".

Comienzo complicado: "Nos costó entrar"

El Grupo Ureta Tizona saltó a la cancha con "muchas ganas de jugar bien el partido", pero les "costó mucho entrar" por falta de concentración que afectaba al manejo del balón y a los rebotes.

A medida que avanzó el cronómetro el partido "se hizo difícil por los puntos de contraataque, los malos balances nuestros, sus puntos rompiendo la presión y sus puntos de uno contra uno. En la primera parte, el Betis jugó con confianza y tranquilidad, además de la calidad de sus jugadores y su planteamiento, también influyeron nuestros errores", analizó el entrenador orensano del Tizona.

Fue a partir del tercer cuarto cuando el equipo burgalés volvió a la cancha con una actitud "diferente", más aplicado y focalizado "y poco a poco fuimos entrando en el partido".  Ese cuarto finalizó con un parcial de 21-28 (+7), que dejó el marcador en 71-67 y metió de nuevo a los burgaleses en la pelea por la victoria.

En el momento crítico, en los últimos compases del partido, Tizona hizo gala de su combinación de veteranía y talento joven para amarrar una victoria muy importante con un parcial similar 13-18 (+6) pero con una sensación victoria de ley, ganada con esfuerzo e inteligencia. "Estamos muy contentos, pero queremos mejorar. Hay cosas que mejorar sobre la primera parte", insiste Ocampo.

Objetivo: 14 victorias

Diego Ocampo mantiene la cautela a la hora de marcar objetivos para el conjunto burgalés recordando con cierta frecuencia que el Tizona es un equipo recién ascendido. Que viene, eso sí, de realizar una temporada casi perfecta en LEB Plata con tan sólo tres derrotas entre la fase regular y los playoff. Pero en LEB Oro la igualdad es manifiesta y la exigencia máxima para no verse sorprendido y desbordado por cualquier rival y los objetivos de temporada son otros. Ocampo da la cifra: 14 victorias.

"Dada la competencia en la Liga", señala el entrenador del conjunto azulón, "creo que 14 serán suficientes", que es el objetivo del Tizona "desde el primer día" y "en eso vamos a estar", reafirma.

En las siete jornadas que han transcurrido desde que se inició la competición, el Tizona atesora cinco partidos ganados y dos derrotas. Un botín valioso que supone que hasta la fecha el Tizona ha alcanzado casi el 36% de su objetivo de 14 victorias cuando se han disputado sólo 7 de las 34 jornadas programadas. 

Analizando este rendimiento desde un punto de vista numérico se puede realizar una proyección de dónde podría llegar el Tizona si mantiene este impresionante ritmo a lo largo de la temporada. 

La proyección es que podría alcanzar alrededor de 24 victorias al final de las 34 jornadas, asumiendo que el promedio actual de victorias por jornada se mantenga constante. Sin embargo, hay que tener en cuenta que este cálculo es solo una proyección basada en el rendimiento actual y las circunstancias, casi con seguridad, pueden cambiar a lo largo de la temporada.

"Vivir el día a día" y "disfrutar la victoria"

Más allá de los números y las probabilidades, el deporte deja espacio al estado emocional y en ese sentido, el reflexivo técnico gallego recuerda que para el Tizona "el otro objetivo es vivir el día a día". 

"Ahora toca disfrutar de esta victoria y mañana pensar en cosas a reforzar, aprender y prepararnos para el siguiente día. Poco a poco, nada más, porque si piensas demasiado, la vida te pasa factura. Si deseas demasiado, la vida te pasa factura", argumenta. "Vamos día a día. Vamos a disfrutar de esta victoria con el objetivo de ser muy competitivos siempre y conseguir las 14 victorias, porque somos un recién ascendido". Un consejo valioso para un equipo como el burgalés que "tiene los pies en el suelo". 

"Valoramos mucho lo que nos costó llegar hasta aquí y lo disfrutamos también de poder estar en una liga como la LEB Oro", zanjó.