Los puntos limpios de Burgos recogen el doble de móviles viejos hasta llegar a 4 toneladas

La recogida de teléfonos móviles en desuso y pequeños electrodomésticos como televisores o pantallas de ordenador se ha disparado en el último año en los puntos limpios domiciliarios, el Norte y el Sur, el primero en la avenida Islas Baleares, y el segundo en el camino de Valdechoque. Estos son algunos de los residuos que más depositan los 32.000 usuarios que han pasado alguna vez durante el año 2023 por estos centros, incluido el punto limpio móvil.

Llama la atención que se ha duplicado el número de teléfonos móviles, ya que se ha pasado de 2 toneladas recogidas durante 2022 en el Norte y a las 4 del pasado 2023, un número que ha batido todos los récords desde que estas instalaciones municipales están abiertas. En cuanto al número de televisores y pantallas de ordenador, los cálculos facilitados ponen de manifiesto que en 2023 se depositaron 45 toneladas también en el de Islas Baleares. Pero el de la zona Sur no le va a la zaga, ya que se recoge un incremento del 100% porque se ha pasado de 12 toneladas de televisores a 25.

Si se habla en general de aparatos electrónicos o pequeños electrodomésticos que han sido reciclados a través de los puntos limpios de la capital burgalesa en el Norte fueron depositados 133 toneladas, la misma cantidad que en 2022, mientras que en el Sur se pasó de 33 toneladas a 77, más del doble. En este caso, este dato obedece a que lo que recoge Urbaser, que se deposita fuera de los contenedores, fue llevado a este punto para su tratamiento.

Otro tipo de residuos en los que se ha visto un constante incremento, analizados las dos últimas anualidades, son las cápsulas de café, de las que se han recogido 790 kilos en el punto limpio Norte, un 20% más que en el año anterior. Los colchones, las maderas o muebles reciclados, así como los botes de pintura son otros de los productos que más se llevan a estas instalaciones.

Así se desprende de la información facilitada a este periódico por la Concejalía de Medio Ambiente a través de la Fundación Lesmes que, desde la empresa de inserción GRM, se encarga de la gestión de los puntos fijos, así como del móvil, el que recorre de lunes a viernes distintos lugares de la capital burgalesa para retirar desperdicios de menor volumen.

En concreto, la recogida de viejos colchones aumentó entre 2022 y 2023 en un 25% hasta llegar a 42 toneladas, mientras que en muebles creció un 30% hasta las 330 toneladas y en botes de pintura fue de un 30% con 3.500 kilos en el último año.

La apertura durante los fines de semana, después de la entrada en vigor del último contrato de gestión del servicio aproximadamente en septiembre de 2021, se considera positiva porque es uno de los momentos en que los ciudadanos tienen tiempo de hacer limpieza en sus hogares y aprovechar para deshacerse de objetos que ya no utilizan.

La media de usuarios en domingo suele estar entre 10 y 20 personas, pero la apertura entre semana siempre deja mejores números con picos de jornadas en los que se superan los 80 usuarios.

Punto limpio móvil

El número de usuarios del punto limpio móvil, que recorre de lunes a viernes la ciudad con diferentes paradas, se ha incrementado de manera constante desde que este servicio se puso en marcha, a finales de septiembre del año 2021. Aquí puede consultar sus horarios y rutas.

Por ejemplo, en el último año han pasado un 20% más de personas hasta llegar a las 4.000 durante 2023. Los residuos más depositados son los pequeños electrodomésticos desde tostadores a batidoras e incluso también teléfonos móviles, hasta radiografías, cápsulas de café y todo tipo de luminarias.

Desde Fundación Lesmes, observan que los vecinos de Burgos agradecen la posibilidad de dejar cerca de su casa pequeñas cantidades de residuos que, de otra manera, podrían ir a parar al contenedor de resto. Los puntos limpios domiciliarios están para recibir también todos estos materiales que se desechan en el móvil, pero es cierto que es necesario acudir con el vehículo particular y hacer el viaje a propósito hasta allí. Por tanto, la cercanía se ha demostrado como un plus para mejorar los datos de recogida.

Por otro lado, otro de los nuevos servicios que se pusieron en marcha con el último contrato fue la apertura de la tienda circular, en la calle Andrés Martínez Zatorre, que está funcionando muy bien en los últimos meses. Así, por ejemplo, han ampliado horarios y abren mañana y tarde y han comenzado a vender ropa de segunda mano.