40.000 trabajadores burgaleses se jubilarán en los próximos 10 años
Así se revela en un informe elaborado por FAE, junto a Cajaviva y Fundación Caja Rural. Una situación que afectará, de diferente manera, a todos los sectores de producción.
El envejecimiento de la población conlleva muchos factores asociados. Uno de ellos es el que atañe directamente al mercado laboral y que en Burgos abocará a 40.000 burgaleses a la jubilación. Puestos que se perderán en la vida laboral activa de la provincia. La mayoría son personas que, en este momento, tienen más de 55 años y que suponen un peso importante en el sector productivo de la provincia, ya que son el 25,33% del total de afiliados. Un cuarto de los trabajadores de Burgos.
Son datos que se recogen en el estudio elaborado por la de Confederación de Asociaciones Empresariales, FAE, con el apoyo financiero de la Fundación Cajaviva y Fundación Caja Rural.
Una situación que tendrá reflejo en todos los sectores, aunque no lo hará de igual manera.El primer lugar se sitúa la agricultura, donde se prevé que en la próxima década se jubilen el 50,26%. En segundo lugar, encontramos al sector industrial, con un 44,43% de jubilados, seguido del sector servicios con un 34,83%, y en último lugar, el sector de la construcción con un 34,07%.
Significativo son también los datos referidos al personal doméstico, con 42,85%, la administración pública, 42,66%, la agricultura y ganadería con 40,20%.
Las ocupaciones más envejecidas son los oficios de reparación, desde ordenadores a electrodomésticos, pasando con relojes o calzado, donde se esperan cerca del 49% de jubilaciones. Signficativas son también las cifras relativas al personal doméstico, de limpieza, jardinería o porterías con un 35,85% de jubilaciones o la seguridad privada con 34,14%.
Por grupos profesionales destaca el sanitario, tanto público como privado, donde se calcula que en los próximos años se producirán un elevado número de jubilaciones, concretamente, el 30,16%.
Entre ellos, protésicos, dentales, médicos y farmacéuticos de Burgos que se sitúan en edad de jubilación en los siguientes porcentajes, respectivamente: 42,11%, 34,16% y 32,97%. Hay que tener en cuenta también el de enfermería, con una tasa del 22,07%. En el otro extremo se encuentra los fisioterapeutas se sitúan como el colectivo más joven con una posible jubilación el 9,20%, el 4,23% y el siendo los logopedas, terapeutas ocupacionales y 3,66%, respectivamente.
Otra de las profesiones que se verán más afectada será la docencia, ya que en la actualidad el 75 % de las plantillas tiene al menos de 55 años, por lo que uno de cada cuatro se jubilarán en los próximos diez años.
«Este estudio es una llamada a tener que actuar, evidentemente, pero no solo al sector público, sino también a las empresas porque van a tener que ir programando actuaciones para paliar los posibles efectos», según señaló Ramón Sobremonte Mendicuti, Director General de Cajaviva Caja Rural.
Sobremonte señaló, también, que esta situación de envejecimiento de las plantillas no solo supone debilitar el tejido empresarial, sino también va a repercutir en el sistema de pensiones y las prestaciones sanitarias y sociales, considerando que para el año 2037 se prevé que la edad media de los burgaleses alcance los 49,46 años.
Una situación que no sólo afectará a los trabajadores sino que también tendrá consecuencieas directas en la gestión empresarial. Las compañías de Burgos se enfrentan a retos como la diferencia de competencias entre generaciones, la brecha digital y la necesidad de actualizar constantemente las habilidades de su plantilla.
Causas Principales
El informe apunta a diferentes causas principales de esta situación. Primero se sitúa el envejecimiento de la población. Una tendencia general en el resto del mundo y de la que no es ajena España y nuestra comunidad. De hecho, Castilla y León es la segunda comunidad autónoma de España con mayor edad media de la población, con 48 años, tan solo superada por Asturias.
En segundo lugar, se sitúa la despoblación. Según las proyecciones demográficas aportadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en los próximos 15 años cuatro comunidades autónomas perderán población. Entre ellas, está incluida la nuestra, con una caída estimada del 4 %.
Como tercera causa señalan la salida de los jóvenes para buscar su futuro fuera de la provincia. En concreto, se marca que el 25% de los jóvenes salen de la comunidad autónoma, a buscar su futuro. Un dato que duplica la media del país, que en este momento se encuentra en el 13,1%. La tendencia escala hasta el 35 % si se refiere a personas con formación universitaria, por lo que uno de cada tres estudiantes al acabar sus carreras ejercen fuera de la región.
Tendencias que van a impactar en los burgaleses nacidos en 1958 cumplieron el año pasado los 65. Esta generación, la primera del grupo conocido como baby boomers, empieza ya a jubilarse de forma masiva a partir del añop 2030.
Otro punto crítico es combatir discriminación social por cuestión de edad que afecta a muchas personas mayores. Una situación que en Burgos afecta principalemente a mujeres que han superado la barrera de los 50 años. Un problema que puede limitar las oportunidades laborales de los trabajadores mayores y menospreciar su contribución. Para ello, el informe aboga por sensibilizar tanto a las organizaciones como a la sociedad sobre el valor de la experiencia en el entorno laboral.
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El estudio advierte que, aunque no es posible revertir el envejecimiento, sí se pueden implementar políticas que mejoren la calidad de vida de los mayores de 65 años, permitiéndoles continuar aportando su experiencia al tejido empresarial o, en la misma dirección, avanzar hacia un modelo de jubilación progresivo.
Migración regular como una solución
Una situación que supone poner en marcha medidas urgentes para paliar los efectos del envejecimiento, y fomentar el relevo generacional para garantizar la sostenibilidad económica de la provincia. Ante estos datos, el presidente de la FAE, Miguel Ángel Benavente, apuntaba, «solo hay dos maneras, la natalidad. En este momento el indice es el mas bajo de los últimos 50 años. Y la inmigración, que tendríamos que empezar a plantearnos el serio».En este sentido, el presidente de los empresarios de Burgos aboga por implementar medidas que ayuden a la regularización y el asentamiento de la población migrante. «La inmigración que más suena es la de las pateras, pero la que llega es por los aeropuertos. La mayoría de los inmigrantes que están en España, han venido con un visado de turista que ha caducado y se ha quedado aquí».
Por otro lado, se refleja en las conclusiones la posibilidad de convertir a Burgos en un polo de atracción de talento, promoviendo inversiones productivas en sectores de alto valor añadido como, la tecnología, las energías renovables y la investigación. Sin embargo, está situación deberá tener en paralelo una serie de mejoras para, con salarios competitivos que resulten atractivos,ya que en los próximos años se deberá «competir con el resto de las regiones del país» que también necesitarán aumentar su población en edad de trabajar.
Otra de la soluciones se plantea extender la vida profesional más allá de los 65 años. Un enfoque que consideran, no solo aliviaría la escasez de mano de obra, sino que también contribuiría a la sostenibilidad de las pensiones.